🧩 10 señales tempranas del autismo que no debes pasar por alto.
Una guía para padres que observan, intuyen y aman
“A veces el alma detecta lo que la mente aún no comprende.”— Testimonio anónimo de una madre
🔍 Temas tratados en este artículo.
- señales tempranas del autismo
- síntomas de autismo en bebés
- cómo detectar el autismo a tiempo
- señales del TEA en niños pequeños
- cómo saber si mi hijo es autista
👀 ¿Por qué es importante observar las señales tempranas?
Los primeros años de vida de un niño son un terreno fértil para el desarrollo. Aprenden a comunicarse, a mirar, a responder, a explorar. Y es en ese mismo proceso que, a veces, padres y cuidadores perciben que “algo es diferente”. Puede ser leve, puede ser evidente, pero muchas veces esa diferencia no tiene que ver con un retraso, sino con una forma distinta de experimentar el mundo.
El autismo, o Trastorno del Espectro Autista (TEA), es una condición del neurodesarrollo que empieza a manifestarse antes de los 3 años, aunque no siempre es evidente a esa edad.
Reconocer las señales tempranas no es poner una etiqueta, es abrir una puerta a la comprensión, al acompañamiento y a una vida más plena para el niño y su familia.
📋 Las 10 señales tempranas del autismo explicadas
Aquí te presentamos una guía ampliada y explicada de las señales que más frecuentemente se observan en los primeros años de vida de niños con autismo. No todas deben estar presentes. Pero si reconoces varias, lo ideal es consultar con un especialista.
1. 🧏♂️ No responde a su nombre (8-12 meses en adelante)
Los bebés suelen responder al escuchar su nombre. Giran la cabeza, sonríen o emiten sonidos. Un niño que no reacciona ante su nombre después del primer año de vida, a pesar de oír bien, podría estar mostrando una dificultad en el reconocimiento social.
Señal emocional: Muchos padres comentan: “Pensaba que tenía problemas de audición”.
En algunos casos, incluso se le hacen pruebas auditivas antes de considerar el TEA.
2. 👁️ Evita o limita el contacto visual
Desde recién nacidos, los bebés buscan la mirada de sus cuidadores. Esta es una forma primaria de conexión emocional. Si el niño evita mirar a los ojos, no sostiene la mirada o parece “perderse” en otro lugar cuando se le habla, puede ser una señal de que la conexión social está funcionando de forma distinta.
Importante: No es falta de cariño. Es otra forma de procesar el mundo.
Algunas personas autistas describen el contacto visual como “incómodo” o “intenso”.
3. 🧍♂️ No imita gestos simples (hasta los 15 meses)
Imitar es parte esencial del aprendizaje. Saludar con la mano, aplaudir, decir “adiós”... son pequeñas acciones que indican que el niño está observando e intentando integrarse socialmente. Si no imita gestos simples hacia los 12-15 meses, se recomienda una evaluación.
Ejemplo real: “Veía que en la guardería todos los niños imitaban a la maestra… menos el mío. Estaba en su mundo.”
4. 🎲 Poco interés por el juego social o simbólico
Entre el año y medio y los 3 años, los niños empiezan a jugar a “hacer como si”. Dan de comer a un muñeco, imitan un teléfono, inventan juegos simples. Los niños con autismo suelen preferir juegos repetitivos, como alinear objetos, hacer girar ruedas o centrarse en partes de los juguetes.
No es que no jueguen. Juegan diferente.
Pero es clave observar si comparten el juego contigo o si lo hacen solo para sí.
5. 🗣️ Retraso en el lenguaje o ausencia de palabras funcionales
El desarrollo del habla es variado, pero a los 18 meses se espera que un niño diga algunas palabras significativas, y a los 24 meses, que combine dos palabras.
En niños con TEA, es común ver:
- Retraso en iniciar el habla.
- Repetición constante de frases (ecolalia).
- Uso de palabras fuera de contexto.
Ojo: Algunos niños autistas pueden hablar fluidamente, pero no comprenden las reglas sociales del lenguaje, como mantener un turno, responder a emociones o adaptarse al entorno.
6. 🔁 Movimientos repetitivos o estereotipados
Los movimientos repetitivos no son “malos”, pero pueden ser una señal cuando:
- Son constantes.
- Aparecen en momentos de estrés o emoción intensa.
- Interfieren con la atención o el juego.
Estos pueden incluir: aleteo de manos, balanceo, saltos, giros, golpeteo de objetos o frotarse las orejas.
Algunos niños hacen estos movimientos para autorregularse emocional o sensorialmente. En autismo, esto se llama “stimming”.
7. 🔊 Reacciones atípicas a estímulos sensoriales
Muchos niños con TEA muestran hipersensibilidad o hiposensibilidad a estímulos como:
- Ruidos fuertes (licuadora, timbre, fiestas).
- Luces brillantes o parpadeantes.
- Texturas de ropa o comida.
- Olores intensos.
Ejemplo: Una niña puede cubrirse los oídos ante el ruido de una licuadora, mientras un niño puede buscar golpear objetos constantemente para “sentir algo”.
8. 👉 No señala ni comparte intereses con el adulto
Un niño típicamente en desarrollo señalará algo que le interesa y buscará tu mirada para compartirlo: un avión, un perro, una flor. A esto se le llama atención conjunta.
En el autismo, esto suele faltar. El niño puede mostrar interés en objetos, pero no buscar compartir esa experiencia contigo.
Esta señal es una de las más importantes para los especialistas.
9. 😐 Pocas expresiones emocionales o reacciones “neutras”
Los bebés y niños pequeños suelen sonreír, fruncir el ceño, reír, buscar consuelo.
En el autismo, la expresión emocional puede ser:
- Más reducida o plana.
- No concordante con la situación (por ejemplo, reír sin motivo claro).
- Difícil de interpretar.
Esto no significa que no sientan emociones.
Las sienten, pero las expresan de forma distinta.
10. 🔄 Resistencia al cambio y apego a rutinas rígidas
Muchos niños con autismo encuentran seguridad en la repetición.
Cambiar de camino al parque, modificar el orden de los juguetes o usar una taza diferente puede causar angustia o crisis.
Las rutinas les permiten predecir y dar sentido a un mundo que muchas veces les resulta caótico o impredecible.
🧭 ¿Qué hacer si reconozco estas señales en mi hijo?
- Confía en tu intuición. Eres quien mejor conoce a tu hijo.
- No te sientas culpable. No es tu culpa. No hiciste nada mal.
- Consulta con un pediatra o neuropediatra. Lleva por escrito lo que has observado.
- Evita compararlo con otros niños. Cada niño es único. Pero la detección temprana es clave.
- Busca acompañamiento. Hay familias, comunidades y especialistas que entienden lo que estás viviendo.
📚 Recursos confiables
- CDC - Learn the Signs. Act Early: https://www.cdc.gov/ncbddd/actearly/index.html
- Autism Speaks - Early Signs: https://www.autismspeaks.org/early-signs-autism
- Asociación Peruana de Autismo (APPDA): https://appda.org.pe/
- Libro recomendado: “Mi hijo es autista: y ahora ¿qué?” – Olga Bogdashina
💬 Testimonio real de una madre
“Yo sabía que algo era distinto… No me miraba a los ojos, no respondía cuando lo llamaba. Me decían que exageraba. Hoy tiene 5 años, está diagnosticado y está feliz. El diagnóstico me ayudó a comprenderlo, no a limitarlo.”— Ana, mamá de Joaquín
🤝 Palabras finales
Detectar estas señales no debe darte miedo, debe darte esperanza.
Si las reconoces, no estás perdiendo tiempo, estás ganando oportunidad.
El diagnóstico no es un fin. Es un punto de partida para acompañar mejor.